Técnica y procedimiento

Nuestra técnica artesanal

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En primer lugar, airearmos la lana y le separamos las fibras con un procedimiento mecánico, para devolverle a la lana la elasticidad y confort que tenía antes del lavado y el transporte.

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Se coge la ropa de algodón y se prepara por la parte interior poniendo un refuerzo (también de ropa, que llamamos "pedacito" en los lugares donde posteriormente pondremos la veta que sujetará la lana para que no se desplace.

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A continuación ponemos los ojillos haciendo los agujeros con un punzón y utilizando el pon ojillos. Los ojillos son los refuerzos metálicos·de los agujeros por donde pasaremos las vetas una vez el colchón esté lleno de lana.

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Tras este paso previo, la tela ya está preparada y la cosemos en forma de saco.

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Llenamos el colchón, vigilando que las puntas queden bien llenas y poniendo más lana en la parte central, para que,al dormir, con el paso del tiempo, no quede un bache..

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Posteriormente, cosemos a mano lo que sería la boca del colchón, rellenando la punta para que el extremo quede también bien lleno.

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Una vez tenemos el colchón completamente cerrado, cosemos todo el contorno tanto por su parte superior como por la inferior con un cosido que llamamos "la inglesa"; se llama así porque es precisamente de este país de donde proviene la técnica de este cosido.

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En este cosido se hace como si se hiciera un bordón, cogiendo también lana del interior del colchón para darle más grueso.

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Finalmente, se coge una aguja mucho más larga (de unos 15 cm) y se pasa una veta. Se hace pasar de arriba abajo del colchón y luego de abajo arriba, a través de los ojillos, y se hace un lazo, que queda por fuera. Esto se reparte en diferentes zonas del colchón, de manera simétrica, para evitar que la lana se pueda desplazar por el peso de la persona que duerme de un lado a otro y para darle también más consistencia.

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