No se habla porque no interesa… No interesa, quiero decir, a las grandes fábricas que hacen los colchones como churros, y que al cabo de 10 años dicen que los tienes que tirar porque ya están dañados (y en eso sí que tienen toda la razón!), porque utilizan materiales muy sintéticos, con fecha de caducidad, sin posibilidades.
Los centros de recogida y los contenedores están llenos.El colchón de lana es la opción más sostenible para descansar. Y hablo de sostenibilidad tanto económica como ecológica.
Lo hace el colchonero con sus manos, aquí, en el País (con condiciones laborables de aquí, claro)
Usa lana de oveja de los Pirineos y lo viste de ropa de algodón 100%, ambos materiales naturales que se biodegradan totalmente.
Y… sí, es un colchón que no es necesario cambiar cada 10 años, te durará muchos más.